La alimentación de los niños puede presentar desafíos a los padres que en la mayoría de los casos son transitorios. Sin embargo, la prevalencia de problemas de alimentación entre los niños con trastornos del espectro autista es mayor y suele ser más duradera.
Relatos anecdóticos han incluido a niños que sólo se alimentan de los productos que son de un color determinado, por ejemplo, solo comen alimentos ”amarillos”. Otros solo comen preparaciones con una determinada consistencia, como las papillas para bebes; y muchos tienen dietas limitadas ya que sólo comen cuando el alimento se ha presentado en de una manera particular.
Los pocos informes técnicos sobre los problemas de alimentación que se han llevado a cabo con los niños con autismo han informado una alimentación selectiva basada en la presentación de alimentos y en alimentos tipos. Los resultados de este estudio, que apoyan investigaciones previas, muestran que los niños con autismo tienen una alimentación que está restringida por la categoría de alimentos, y que estos niños se niegan a aceptar nuevos alimentos con una frecuencia mayor que los niños con un desarrollo típico. En este estudio, los padres informaron que sus hijos con autismo tenían problemas más generales de alimentación incluyendo rechazo a los alimentos; requerimiento de presentaciones específicas de los mismos y utensilios específicos; restricciones en cuánto a la textura, prefiriendo sólo alimentos blandos; y limitaciones a una estrecha variedad de alimentos.
Los resultados indican que los problemas que los padres de niños con autismo enfrentan durante situaciones de alimentación siguen persisten mucho después de que las visitas de rutina al pediatra dejan de concentrarse en las tablas de crecimiento. Debido a que los problemas de alimentación no parecen ser tan transitorios para los niños con autismo como para los niños sin autismo, los médicos deberían seguir abordando estos temas en los niños con autismo durante más tiempo. De hecho, un estudio ha demostrado que si el problema de alimentación selectiva de los niños con autismo no se aborda, estos niños están en mayor riesgo de problemas médicos relacionados nutricionalmente, como el raquitismo. Aunque los efectos a largo plazo de los problemas de alimentación no estén claros, sin duda es posible que puedan conducir a déficits nutricionales y otros problemas médicos.
Modificado de: Schreck K, Williams K, Smith A (2004) A Comparison of Eating Behaviors between Children with and without Autism. Journal of Autism and Developmental Disorders 34: 433-438
